Independiente Rivadavia logró una histórica clasificación a la final de la Copa Argentina de fútbol y le dio otro duro golpe a River. El equipo mendocino se impuso 4-3 en definición por penales luego del empate sin goles en el estadio Mario Alberto Kempes de Córdoba, en una serie que terminó sin goles en tiempo reglamentario.
Independiente Rivadavia buscará la consagración ante Argentinos Juniors, en una definición inédita que tiene fecha y sede a confirmar.
El partido comenzó con mucha dinámica y dos posturas bien definidas. River mostró una actitud diferente respecto a los encuentros anteriores, con mejores conexiones a partir de la influencia de Juan Fernando Quintero, y no tardó demasiado en buscar el arco rival. Independiente Rivadavia también se mostró decidido: recuperaba rápido y atacaba directamente con la velocidad de sus delanteros, especialmente Sebastián Villa.
El equipo mendocino no resolvió bien una contra en superioridad numérica y, cuando desbordó el ex Boca, no encontró conexión en el área.
River tuvo su primera llegada clara cuando combinaron Quintero, Salas y Driussi. Sin embargo, le costó encontrar al delantero que desde la MLS, quien sufrió una nueva lesión y fue reemplazado por Colidio a los 36′.
“Juanfer” fue el jugador que más peligro generó, tanto con sus pases punzantes como con sus remates de media distancia. En uno de esos intentos, su zurdazo se estrelló en el palo.
Luego llegó otra situación muy clara, con tres remates consecutivos, el último de “Nacho” Fernández, pero entre el arquero Centurión y los defensores lograron rechazar el peligro.
Independiente Rivadavia también tuvo su oportunidad, mediante una pelota parada que Osella cabeceó desviado.
La lluvia, que se intensificó en el tramo final del primer tiempo, continuó con fuerza durante el descanso, anegando varios sectores de la cancha y obligando a la suspensión momentánea del encuentro: tardó 48 minutos en reanudarse.
El estado del terreno condicionó el juego en el los primeros 20′ del complemento. El equipo de Gallardo intentó llegar de forma asociada, pero le resultó muy complicado. Independiente buscó en largo, pero tampoco pudo atravesar los sectores con mayor agua.
Después, la pelota rodó mejor y el ingresado Cristian Jaime le dio mayor claridad y explosión al “millonario”. Ni Colidio ni Borja acertaron al arco y un cabezazo “bombeado” de Rivero dio en el horizontal. Ya en tiempo de descuento, Ezequiel Centurión evitó el gol de Galoppo con una atajada sensacional. Después, le atajó el penal a Borja, Galoppo falló el suyo y el festejo fue mendocino.
