Por Ramiro Melucci
“No va a ser un gobierno libertario”, dice uno de los hombres más involucrados en la génesis de la próxima gestión municipal, que encabezará Agustín Neme. No es una frase lanzada al azar. Llega cuando se está delineando un equipo para asumir el 10 de diciembre. Cuando se están manteniendo conversaciones para garantizar la gobernabilidad. Cuando nadie pone en duda el diálogo fluido con La Libertad Avanza, pero todos son conscientes de que con eso solo no alcanza. Y cuando el radical Maximiliano Abad comienza a repetir, en privado y en público, que su partido no va a participar de una administración libertaria.
La advertencia no parece referir a una cuestión ideológica: hace tiempo que Montenegro se pintó de violeta y actúa como tal, pero la alianza entre ambos se mantiene hasta el último día. Aludiría, en cambio, a un aspecto mucho más terrenal: la cantidad de cargos del gabinete de Neme que serán completados con dirigentes del partido de Javier Milei.
Por ahora hay una certeza: Alejandro Carrancio, el referente del Presidente en Mar del Plata y la región, acordó con Montenegro un puñado de puestos que el próximo jefe comunal se comprometió a respetar. Si ese puñado puede ampliarse todavía se desconoce. Pero debe anotarse otra certidumbre: Carrancio ha dicho que no está en los planes de su fuerza política cogobernar con el PRO, sino “ayudarlo” hasta 2027.
¿Puede el gabinete contar con algún radical? Cerca de Neme dicen que no hay razones para descartarlo. En un contexto distinto, con otra relación de fuerzas, anhelan un modelo que pueda asimilarse al de Montenegro. Hasta sueñan con un vínculo menos conflictivo con la oposición, a la que en ciertos momentos podrían necesitar.
Mientras Neme hace equilibrio, la visita de Milei mostró el alineamiento total de Montenegro al plan libertario. El encuentro, los abrazos y las fotos en Lamb Weston se produjeron después de que el intendente hiciera su primera declaración pública sobre el escándalo que involucra a José Luis Espert. Eligió su cuenta de X. Y fue inesperada: destacó el “gesto inédito” de “dejar el ego de lado” y bajarse de la candidatura. Es decir, aludió a un aspecto que solo la dirigencia política podría comprender, cuando lo verdaderamente importante pasa por otro lado: las dudas que dejaron las explicaciones de Espert sobre su vínculo con Fred Machado, el empresario acusado de integrar una red de narcotráfico y lavado de activos.
Corrigió, casi a desgano, cuando un grupo de periodistas le preguntó por el episodio. “Es más para analistas”, se atajó, pero agregó que Espert “tiene que dar las explicaciones en la Justicia”. Tampoco a Milei le agradó que le preguntaran sobre el tema, y tuvo una reacción aún más desconcertante que el tuit de Montenegro (“¿Querés discutir el asesinato de Kennedy? Nosotros no fuimos”, le respondió al periodista de Canal 8). Como si la decisión unilateral de dar vuelta la página y no hablar más sobre el diputado caído en desgracia corriera para todos.
En un contexto distinto, con otra relación de fuerzas, cerca del próximo intendente anhelan un modelo que pueda asimilarse al de Montenegro.
En su etapa final, el gobierno local ha ingresado en un terreno de apuros, tensiones y contradicciones. Una oleada de nombramientos deja raquítica aquella definición inaugural de que “funcionario que ingresa, se va al finalizar la gestión” y vuelve a poner en guardia al sindicato municipal. A su vez, una serie de proyectos de ordenanza enviados o por enviar al Concejo Deliberante pondrán a prueba la vigencia de la mayoría automática hasta último momento.
El paquete por ahora incluye la emergencia en la recolección de residuos, la prórroga del contrato con la empresa 9 de Julio y la adjudicación del estacionamiento medido a Boldt Tech. Podrían agregarse el presupuesto, las ordenanzas fiscal e impositiva y la extensión de la concesión del transporte.
Otro frente de tormenta es el costero. El municipio celebró la resolución de la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo para que sea la Justicia local, y no la de La Plata, la que intervenga en la causa sobre la municipalización de Punta Mogotes. Pero continúa pendiente de resolución la medida cautelar solicitada por la Municipalidad para impedir que la Provincia avance con cualquier tipo de iniciativa en el sector: refiere al concurso de ideas para la renovación arquitectónica del complejo de balnearios y su entorno.
La Provincia también puso en el centro de la escena a Mar del Plata con un par de resoluciones administrativas vinculadas con la franja costera. Dejó claro que los municipios necesitarán el aval de la Autoridad del Agua para autorizar obras, y prohibió los loteos y la edificación a menos de 150 metros del mar. Las normas dicen “municipios” por una cuestión de decoro: son, ante todo, advertencias para el de General Pueyrredon.
El conflicto por Playa Acevedo es otro que sumó un nuevo capítulo. En medio de la controversia con Once Unidos por la imposibilidad de que el club se presente en la licitación, el Ente de Turismo suspendió la apertura de sobres que estaba prevista para el próximo viernes. El argumento oficial gambeteó la cuestión y señaló, con un halo de misterio, que “se advirtieron ciertas condiciones topográficas del sector a licitar que aconsejan revisar aspectos del procedimiento en curso”.
Las nuevas normas provinciales para el sector costero dicen “municipios” por una cuestión de decoro: son, ante todo, advertencias para el de General Pueyrredon.
Ni allí donde las estadísticas acompañan hay sosiego. El Foro de la Construcción, satisfecho con los metros cuadrados construidos en el último período, pidió extender los incentivos a la actividad otorgados en 2021. El expediente, impulsado por el Ejecutivo en el Concejo Deliberante, ya tiene el aval de la comisión de Obras pero no el de Legislación. ¿El motivo? El gobierno local todavía no respondió un pedido de información que le formularon los concejales.
En ese contexto, el Foro que agrupa a los colegios profesionales, las cámaras empresariales y la Uocra no se privó de plantear la problemática de las obras clandestinas y la demora en los trámites de la Dirección de Obras Privadas, aspectos sobre los que ya había advertido el Colegio de Arquitectos. Pidió además que lo consulten para la designación del próximo secretario de Obras, “a fin de contribuir a una gestión más ágil, participativa y transparente, orientada al desarrollo sostenible de la construcción en la ciudad”.
Más que por lo que dice, el párrafo impacta por lo que deja entrever: las que menciona serían cualidades que no identifican en la gestión actual.