En una historia que conmovió a toda la comunidad, Atilio, un perrito mestizo, fue encontrado con un cuchillo de 18 centímetros clavado en su cuerpo. El brutal ataque dejó al animal en estado crítico, pero gracias a la solidaridad de vecinos y rescatistas, su historia dio un giro esperanzador.
Débora, la mujer que lo rescató, no dudó en actuar. “Llevarlo a la cirugía fue terrible, pensé que no iba a aguantar. Me quedé durmiendo al lado de él, esperando que resistiera hasta el mediodía”, relató con la voz aún quebrada por la emoción. La operación, que duró una hora y media, fue un éxito total. “Pensé que iba a ser más larga, pero todo fue bien. Es un milagro que esté recuperado, es increíble”, agregó.
El caso de Atilio no solo puso en evidencia la crueldad que algunos animales aún sufren, sino también la enorme capacidad de empatía de muchas personas. “Se lleva bien con todos los perros, es un amor”, cuenta Débora, quien lo acompaña en su recuperación.
Ahora, con su cuerpo sanando y el alma dispuesta a confiar nuevamente, Atilio espera una segunda oportunidad: la de encontrar una familia que lo adopte y le dé el amor que merece.
